Es una hora calurosa
son las doce del día
La actividad no cesa,
minuto a minuto corría...
cada persona buscaba
su alimentación conveniente,
alguien llevaba
lo que su bolsa le permitía...
La jornada terminaba,
es decir la primera,
faltaba la última
la más anhelada.
Al llegar la hora final
de un día de faena
se desea el descanso...
Llegar al hogar bendito
donde le espera su hijito
sediento del calor
donde le espera su hijito
sediento del calor,
de la madre al regresar
al igual que los pajaritos
abriendo sus piquitos
Los niños extienden sus bracitos
para decir de su madre
el calorcito....anhelado...
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