Gloria a ti soldado
que acudiste al llamado
de tu sagrada patria...
Morir por ella no importaba,
había en ti tanta euforia,
que dejaste tu adolescencia
y la comodidad de tu hogar...
En tus manos estaba la esencia
de la lealtad hacia el lugar
de esta tierra donde naciste,
y la luz de un nuevo amanecer
por primera vez viste...
En tu corazón a tu familia guardaste
y de ésta, gran orgullo fuiste,
cada día, cada noche, cada hora,
tus seres queridos, en ti creyeron....
Madre, esposa, hijos, la patria llora,
honra la memoria de los que cayeron....
También la patria rinde homenaje
a los que aún le sirven con firmeza,
a la libertades, que con tanto coraje,
defendieron con toda su fuerza...
¡Soldado salvadoreño, ¡Que Dios te bendiga!
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